Dedicando el tiempo a dejar pasar el tiempo. Madurez fuera del alcance de la mente

lunes, 29 de septiembre de 2008

Preguntas recurrentes


¿Somos jóvenes? ¿Somos viejos? ¿Somos niños? ¿Qué es un niño? ¿Queremos tener niños? Un niño como ése, da igual que no sea rubio ni tenga los ojos azules.
Los amigos, las amigas, la familia. ¿Existe la amistad entre hombres y mujeres? La línea recta no existe, es larga y curva, en este planeta circular.

domingo, 28 de septiembre de 2008

Verde jardín sin pisar


El otoño ha llegado y los jardines están más verdes, he tenido que dejar las sandalias para coger las zapatillas de casa y mi gata está más peluda.
La vida discurre rápida, interesante, inmisericorde. Ya no sé nada o lo que es peor: no sé qué querer saber. No sé con quién quiero estar, con quién no, en qué trabajar, en qué dedicar mi tiempo.
La vida discurre rápida, mi gata cada día está más guapa, yo cada día estoy más cansado.

lunes, 22 de septiembre de 2008

En el bosque de Bolognia


Piensas que te siguen, sabes que nadie te sigue. Te dejas escurrir, te dejas discurrir. Y empiezas a respirar todavía intranquilo. Por fin acompañado, acompañado por la paloma que vigila que nadie te moleste.
Afortunadamente pronto llegará esa tarde diseñada por ti, diseñada para ti. Esa tarde cuando podrás seguir leyendo sin leer.

martes, 16 de septiembre de 2008

Cultivando melocotones enfermos


Un día acudí a mi huerto a recoger melocotones, pero todos estaban verdes. Otro día me acerqué para ver cómo maduraban, pero sólo estaban maduros aquéllos que estaban enfermos. Dejé pasar el tiempo para que se cayeran todos aquellos melocotones enfermos y entonces regresé. No encontré ningún melocotón en los árboles.

domingo, 14 de septiembre de 2008

El día que me puse un calcetín azul y otro negro


El día que me puse un calcetín azul y otro negro, tuve que salir como figurante en un video. El día que me puse un calcetín azul y otro negro, me dijeron que no me cobijarían en París. El día que me puse un calcetín azul y otro negro, empezó a llover cuando salí del trabajo. El día que me puse un calcetín azul y otro negro, me dormí cansado y triste.

lunes, 8 de septiembre de 2008

¿A dónde miran los girasoles?


Antes del atardecer... Hay tantas cosas que hacer antes del atardecer en París...
Lavarás tus pecados, pintarás unos nuevos. Escribirás en tu viejo papel arrugado. Darás cientos de firmas. Irás perdiendo el fotoprotector. Te irás sumiendo en tu cansancio trasnochador. Te reunirás con amigos. Irás a una fiesta cowboy.
Espero que el avión no llegue con retraso.

La despedida de los ojos rojos parpadeantes que te observaban desde el horizonte ha llegado y ya no podrás pasear tu alma por el camino de tierra flanqueado por verdes vides y secos rastrojos.